Vecinos de CABA rechazan un “segundo Puerto Madero” en la Costanera Sur
La iniciativa del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta plantea cambiar las normas urbanas vigentes en un predio de IRSA de unas 71 hectáreas, situadas sobre el río, para permitir la construcción de torres de hasta 45 pisos.
Vecinos y vecinas de la Ciudad de Buenos Aires reiteraron este miércoles, durante una audiencia pública en la Legislatura porteña, el rechazo al proyecto para rezonificar un predio de la Costanera Sur que habilite edificios de 45 pisos al considerar que convertirá la zona en un “segundo Puerto Madero”.
El pronunciamiento se dio durante la octava jornada de las 14 previstas para el desarrollo de la audiencia pública en la Legislatura porteña para escuchar las opiniones de la ciudadanía sobre el convenio urbanístico firmado entre el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta con la empresa IRSA .
La iniciativa del oficialismo plantea cambiar las normas urbanas vigentes en un predio de la empresa de bienes raíces de unas 71 hectáreas, situadas sobre el río, para permitir la construcción de torres de hasta 45 pisos en un emprendimiento denominado “Costa Urbana”, que ya cuenta con una aprobación inicial por parte de los legisladores.
No obstante, la ley requiere, para su sanción definitiva, de un segundo debate en el recinto y -previamente- la realización de la audiencia pública, la cual, en este caso, generó la inscripción para participar de más de 2500 personas.
Voces en contra
Una de las primeras oradoras, Nancy Noya, manifestó su rechazo a “un segundo Puerto Madero” en relación al emprendimiento denominado Costa Urbana sobre la ribera sur, y sostuvo, en contraposición, su respaldo a la iniciativa para “recuperar la Costanera Sur y expandir la Reserva Ecológica”.
“Va a ser un sector exclusivo para una elite que va a tapar los humedales“, observó Claudia Smith, quien agregó que “estamos hartos que nos quieran cobrar por todo sobre lo que tenemos derecho de usar”.
María Teresa Genini se quejó que la audiencia pública convocada por la Legislatura “no sea vinculante” ya que, dijo, “es la voz de la Ciudad la que se expresa”.
En el mismo sentido, Manuel Ovando evaluó que “debería reconsiderarse cuál es la función de la audiencia pública“; mientras que José Luis Hermida manifestó que “para que este tipo de audiencias sirvan, deberían realizarse antes de la primera sanción y con un debate amplio”.
Voces a favor
En la jornada de este miércoles, en tanto, se manifestaron voces a favor del proyecto, como el caso de Damián Tabakman, presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos, quien sostuvo que “es un proyecto extraordinario y bien elaborado desde el punto de vista urbanístico”.
En sintonía, el arquitecto Enrique Fornieles consideró a la iniciativa como “un proyecto bisagra” y opinó que “es una falacia decir que va a cortar el acceso al río”.
Por último, expuso el ingeniero Pablo Gutiérrez Cerezales, en representación de la empresa de energía Enel, que tiene una de sus plantas en una parcela lindante al extremo sur del proyecto Costa Urbana.
“Identificamos dos cuestiones relevantes del proyecto con potencial impacto en la central, los que tienen que ver con el manejo del suelo durante la construcción, ya que el ingreso del polvo en suspensión puede afectar a las turbinas, y la relacionada con el acceso vehicular a la planta ya que existe una sola vía de ingreso por la avenida España”, precisó.